Un tio hijoeputa, los primos traidores y El niño que jode a la niñita

miércoles, 3 de febrero de 2010 |


Ayer decía el comandante presidente "Cumplimos 11 añitos, es un niño todavía nuestro gobierno, es una niña aún la Revolución", parafraseando al comandante, se me ocurrió el titulo de este escrito y utilizando la misma imagen que nuestro presidente, para ilustrar lo que ha sido este trayecto de 11 años vamos a hacerlo ver como un cuento infantil para que los REFormistas lo entiendan y así dejen de jugar a ser los protagonistas.

Erase una vez, una familia que por razones históricas tenia un papel que jugar en la salvación de la humanidad, pues en esa familia (Venezuela) hubo un parto que cambiaría la historia del mundo, de el mismo, nació una niña muy especial a la que sus padres llamaron: Revolucion Bolivariana.

Esta niña hermosa por demás, estaba destinada a crecer y ser la líder de los cambios en el mundo entero, pero la pobre tenia un tío, (el imperio) muy hijoeputa, viejo y bravucon que como espíritu del pasado tiene un plan para asesinar a la niña y poner en practica su mas sádica maldad. Este tío tiene unos sobrinos que sin moral y sin tapujos se prestan por pura malcriadez) y dinero (la oposicion) para el juego del vil tío sin importarle que su sobrina es la esperanza de la familia (la humanidad).

Ahora bien en nuestro cuento hay un hermanito gemelo (porque nació el mismo día que la niña ) que con sus malacrianzas, envidia y malas costumbres (reformismo, burocratismo y corrupción) no deja que la niña se convierta en la protagonista del cuento, ese niño malcriado (el gobierno) no deja que el padre de la niña (el pueblo) sea quien dirija a esta a lograr el cometido que la historia le tiene dedicado a su hermanita, este niño sabotea al padre, no deja que la niña juegue a hacer historia, sin embargo la niña tiene otro aliado que es su madre (la esperanza) que junto al padre hacen todo lo que tienen que hacer para que la niña sea feliz pues la felicidad de la niña es la felicidad de la especie humana.

Pero como todo padre es sabio, este se apoyo en unos muy buenos maestros (los revolucionarios) para que le ayudaran a guiar la educación de èl y de la niña, para enfrentar al tío malévolo, a los primos zagaletones y al hermanito malcriado para enrumbar a la niña a que se convierta en mujer y sea recordada como la niña que salvo a la humanidad.

Amanecerá y Veremos!

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